Tránsito se salva de una cucharada de su propio chocolate: iba a ser mordido.

Un elemento de la dirección de tránsito y vialidad de Madero estuvo a punto de ser mordido por un cocodrilo de aproximadamente 3 metros de largo, cuando el agente vial estaba ayudando a una familia de turistas. 

Fue en la entrada al fraccionamiento las Dunas en el corredor urbano Luis Donaldo Colosio, donde el agente de tránsito se encontraba agachado ayudando a cambiar una llanta de un coche de visitantes de la ciudad de Monterrey, cuando el saurio salió de entre los matorrales y se acercó al elemento de vialidad. 

Al percatarse de esta situación, se alejó del lugar para posteriormente llamar a los bomberos para que lo capturaran, ya que representa un peligro para las familias que a diario transitan hacia el conjunto habitacional.  

Resaltó que al lugar llegó una camioneta de protección civil y bomberos para iniciar la búsqueda, pero el cocodrilo se había ocultado entre la maleza. 

Por su parte los elementos viales llevaron a la vulcanizadora más cercana para parchar la llanta del carro de la familia de Nuevo León, para que pudieran seguir su camino.