– Porque representa una «violación flagrante al derecho internacional» y una afrenta a la soberanía de México.
Se han elevado las tensiones entre #México y #Ecuador, luego de que las autoridades ecuatorianas irrumpieron en la embajada de México en Quito con el propósito de arrestar a un exvicepresidente ecuatoriano que estaba solicitando asilo.
Según las declaraciones del gobierno mexicano, este acto representa una «violación flagrante al derecho internacional» y una afrenta a la soberanía de México.
La secretaria de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena, denunció la acción llevada a cabo por las fuerzas de seguridad ecuatorianas, resaltando que el exfuncionario buscaba protección alegando persecución política.
Como respuesta a este suceso, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha ordenado una enérgica reprimenda hacia las autoridades ecuatorianas, contemplando incluso la potencial suspensión de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones.
«Me acaba de informar Alicia Bárcena, nuestra secretaria de Relaciones Exteriores, que policías de Ecuador irrumpieron por la fuerza en nuestra embajada y detuvieron al exvicepresidente de ese país, quien se encontraba refugiado y tramitando asilo debido a la persecución y acoso que enfrenta», escribió AMLO en su cuenta oficial de X.
Este hecho ha provocado una rápida condena por parte de México, que ha afirmado que tomará las medidas necesarias para salvaguardar sus principios diplomáticos y la integridad de sus instalaciones en el extranjero.
La Canciller Bárcena ha sido instruida para emitir un comunicado oficial y tomar acciones legales correspondientes en represalia por la intrusión y detención realizada por Ecuador.
«Se trata de una violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de México, por lo cual he instruido a nuestra canciller que emita un comunicado sobre este acto autoritario, proceda legalmente y declare de inmediato la suspensión de relaciones diplomáticas con el gobierno de Ecuador», concluyó el mandatario.
EN CONTEXTO
La Policía de Ecuador irrumpió en la embajada de México en Quito y detuvo al exvicepresidente Jorge Glas. El gobierno ecuatoriano argumentó que, al abusar de las inmunidades y privilegios diplomáticos, y otorgar un asilo diplomático contrario al marco jurídico convencional, se procedió con la captura del exfuncionario.
Imágenes de medios locales mostraron el ingreso de uniformados a la legación, resguardada en la parte externa por policías y militares. Roberto Canseco, jefe de la sección consular mexicana en Quito, expresó su consternación afuera de la embajada, calificando el allanamiento como un acto inaceptable.
Poco antes de la irrupción en la embajada, la canciller mexicana había publicado un mensaje en X, instando a Ecuador a conceder el salvoconducto a Glas para permitir su salida.
Este incidente ocurrió en un contexto de tensión entre ambos países, exacerbada por declaraciones del presidente López Obrador sobre las recientes elecciones en Ecuador, que fueron consideradas «muy desafortunadas» por el gobierno ecuatoriano. En respuesta, Ecuador declaró persona non grata al embajador de México.
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